Hace casi 40 años se celebraba la Primera Conferencia Regional sobre la Integración de la Mujer en el Desarrollo Económico y Social de América Latina (La Habana, 1977). La misma abrió un espacio de intercambio regional en favor de las demandas sociales, los derechos de las mujeres y la igualdad de género que empezaban a cruzar los países se convirtieran en compromisos gubernamentales.
Hace unos días se realizó en Cuba una nueva Reunión de la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe en la cual se acordó seguir fortaleciendo la arquitectura institucional en sus países, así como consolidar el diálogo y la cooperación regional para avanzar hacia la igualdad de género en la región.
Organizada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Federación de Mujeres Cubanas, se estableció que la Agenda Regional de Género se emplee como hoja de ruta con vistas a alcanzar la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible a nivel regional desde la perspectiva de la igualdad de género, la autonomía y los derechos humanos de las mujeres.
En la región se identifican cuatro nudos estructurales que es necesario enfrentar: la desigualdad socioeconómica y la pobreza; los patrones culturales patriarcales, discriminatorios y violentos y la cultura del privilegio; la división sexual del trabajo y la injusta organización social del cuidado, y la concentración del poder y las relaciones de jerarquía en el ámbito público. Para superar estos nudos, se establecen 74 medidas en diez ejes de implementación: 1. Marco normativo, 2. Institucionalidad, 3. Participación, 4. Construcción y fortalecimiento de capacidades, 5. Financiamiento, 6. Comunicación, 7. Tecnología, 8. Cooperación, 9. Sistemas de información y 10. Monitoreo, evaluación y rendición de cuentas.
La próxima Conferencia tendrá lugar en 2019 en Santiago de Chile y se abordarán principalmente temas relacionados a la política económica, productiva y fiscal al servicio de la igualdad.