En estos días muchos de mis amigos y colegas, después de pasear un poquito por la página de Red-Genera me preguntan: ¿Por qué diversidad? ¿Cuáles son los beneficios? ¿Por qué debo preocuparme por tener un equipo de trabajo diverso? Algunos afirman “entiendo que sea una preocupación del Estado, pero no es una responsabilidad del mercado”, otros lo entienden sólo como política de imagen positiva.
Sin embargo, el desarrollo de políticas de diversidad conlleva beneficios singulares a las organizaciones toda vez que colabora en la reducción de conflictos laborales, estimula la creatividad y la innovación y mejora los resultados corporativos al generar un clima de satisfacción laboral.
Gestionar la diversidad no es otra cosa que considerar las distintas características culturales, etarias, físicas y de género, al tiempo que integrar los diferentes puntos de vista y estilos de vida, de modo tal que se conviertan en ventajas competitivas para la empresa o institución.
¿Qué es lo que hay qué hacer para convertir la diversidad en una ventaja competitiva? Las medidas pueden ser muchas y muy diversas. Las más conocidas son las políticas de conciliación y la flexibilización horaria. Sin embargo hay muchas más que iremos trabajando en este blog.